Hijo de una profesora de arte, empezó pintando encargos para marchantes europeos.
HUANG JIANG
Al principio tardaba un par de días por cuadro, que vendía a dos euros. Después ganó
maestría consiguiendo finalizarlos en apenas una hora. Huang ha realizado unos 12
cuadros diarios, durante más de 20 años lo que hace un total de más de 100.000 cuadros,
siendo así posiblemente el autor más prolífico de la historia.
Propietario de una impresora en Hong Kong, realizaba reproducciones de pintores
famosos para centros comerciales.
Llegó a Dafen en 1989 buscando un lugar tranquilo donde poder atender los grandes
pedidos de miles de cuadros que le hacían las grandes superficies comerciales
americanas, como Wal-Mart.
El primer taller de pintura fue fundado por el en 1986.
Ahora existen más de 400 talleres similares en esta localidad conocida como
“Villa de los pintores” de Dafen .
Los artistas elegidos son los mejores estudiantes de bellas artes de diferentes escuelas
de China, aunque sus jornadas de trabajo superan con facilidad las 10 horas seis días a la
semana.
A 30 kilómetros de Hong Kong, en la provincia de Shenzen, hay un pequeño pueblo de
pescadores reciclado en pueblo de pintores, y para que así conste, una gran escultura de
bronce, de una mano sosteniendo un pincel preside la entrada del pueblo.
Y es que en este lugar trabajan casi 10.000 pintores reproduciendo a los grandes genios
de la pintura, pero a pesar de ser un trabajo en cadena, ya que utilizan sistemas en
cadena donde cada pintor está especializado en una parte en concreto del cuadro y
pudiendo producir una media de 30 cuadros diarios.
La mayoría de las pinturas son creadas por grupos en los que cada pintor-trabajador se
hace responsable de cierto conjunto de colores o pinturas copiados de la fotografía de un
trabajo ya existente.
Muchos son también producidos por una persona que pinta la misma obra una y otra vez.
Así hay especialistas en hacer Van Goghs, de hecho hay trabajadores que aseguran haber
pintado más Picassos que Picasso mismo.
Cinco kilómetros cuadrados de valla, rodean a media docena de calles empedradas al estilo europeo, con 800 galerías de arte falsificado y glamorosas cafeterías.
Una ‘fabrica’ con miles de talleres donde puedes encargar por unos 35 dólares replicas de Picasso, Leonardo, Rafael, Van Gogh, Miró, Renoir o cualquier artista conocido en una
réplica casi exacta al original.
Tan próspera industria ha generado quejas de numerosos creadores y asociaciones que
preservan los derechos de los autores, por ello el Gobierno Chino a prohibido a las
galerías vender copias de artistas vivos y obras de pintores fallecidos hace menos de
70 años.
Las piezas que se copian en Dafen ya están en el dominio público y por lo tanto no
incluyen el derecho de autor, “La gente sabe que no son los originales”.
De hecho en este lugar se producen nada menos que el 70% de los cuadros que se venden
a nivel mundial, lo que vienen a ser más 5 millones de lienzos al año.
Hasta pronto.
HUANG JIANG
Al principio tardaba un par de días por cuadro, que vendía a dos euros. Después ganó
maestría consiguiendo finalizarlos en apenas una hora. Huang ha realizado unos 12
cuadros diarios, durante más de 20 años lo que hace un total de más de 100.000 cuadros,
siendo así posiblemente el autor más prolífico de la historia.
Propietario de una impresora en Hong Kong, realizaba reproducciones de pintores
famosos para centros comerciales.
Llegó a Dafen en 1989 buscando un lugar tranquilo donde poder atender los grandes
pedidos de miles de cuadros que le hacían las grandes superficies comerciales
americanas, como Wal-Mart.
El primer taller de pintura fue fundado por el en 1986.
Ahora existen más de 400 talleres similares en esta localidad conocida como
“Villa de los pintores” de Dafen .
Los artistas elegidos son los mejores estudiantes de bellas artes de diferentes escuelas
de China, aunque sus jornadas de trabajo superan con facilidad las 10 horas seis días a la
semana.
A 30 kilómetros de Hong Kong, en la provincia de Shenzen, hay un pequeño pueblo de
pescadores reciclado en pueblo de pintores, y para que así conste, una gran escultura de
bronce, de una mano sosteniendo un pincel preside la entrada del pueblo.
Y es que en este lugar trabajan casi 10.000 pintores reproduciendo a los grandes genios
de la pintura, pero a pesar de ser un trabajo en cadena, ya que utilizan sistemas en
cadena donde cada pintor está especializado en una parte en concreto del cuadro y
pudiendo producir una media de 30 cuadros diarios.
La mayoría de las pinturas son creadas por grupos en los que cada pintor-trabajador se
hace responsable de cierto conjunto de colores o pinturas copiados de la fotografía de un
trabajo ya existente.
Muchos son también producidos por una persona que pinta la misma obra una y otra vez.
Así hay especialistas en hacer Van Goghs, de hecho hay trabajadores que aseguran haber
pintado más Picassos que Picasso mismo.
Cinco kilómetros cuadrados de valla, rodean a media docena de calles empedradas al estilo europeo, con 800 galerías de arte falsificado y glamorosas cafeterías.
Una ‘fabrica’ con miles de talleres donde puedes encargar por unos 35 dólares replicas de Picasso, Leonardo, Rafael, Van Gogh, Miró, Renoir o cualquier artista conocido en una
réplica casi exacta al original.
Tan próspera industria ha generado quejas de numerosos creadores y asociaciones que
preservan los derechos de los autores, por ello el Gobierno Chino a prohibido a las
galerías vender copias de artistas vivos y obras de pintores fallecidos hace menos de
70 años.
Las piezas que se copian en Dafen ya están en el dominio público y por lo tanto no
incluyen el derecho de autor, “La gente sabe que no son los originales”.
Dafen, la ciudad de los pintores en China
a nivel mundial, lo que vienen a ser más 5 millones de lienzos al año.
Hasta pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario