Aparentemente el vidrio emplomado, da la sensación que sea un trabajo de artesano.
Cuando miramos un trabajo sobre vidrio emplomado no nos damos cuenta, que el arte
ya empieza en su elaboración, pues es un vidrio especial.
Después se necesita dibujar el diseño del patrón.
Realizar unos cortes perfectos en los cristales.
Cuando se tiene las preparaciones ya concluidas, queda su montaje.
Y como punto final, la colocación en su destino.
En realidad es un arte que no podemos ver en museos.
Cuando miramos un trabajo sobre vidrio emplomado no nos damos cuenta, que el arte
ya empieza en su elaboración, pues es un vidrio especial.
Después se necesita dibujar el diseño del patrón.
Realizar unos cortes perfectos en los cristales.
Cuando se tiene las preparaciones ya concluidas, queda su montaje.
Y como punto final, la colocación en su destino.
En realidad es un arte que no podemos ver en museos.
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